Esta fiesta se celebra en la iglesia de Santa María La Mayor, y comienza la víspera, el miércoles por la noche. Los danzantes, al son de un pasacalles, acompañan a las autoridades desde la puerta del Ayuntamiento a la iglesia de Santa María, donde les espera multitud de gente preparada para disfrutar de uno de los momentos más emotivos que se celebran en Fuentepelayo, las "Vísperas".
Una vez finalizadas las "Vísperas" se canta el "Pange Lingua", en este momento es cuando el sacerdote coge la custodia para hacer el "Rodeo". El sonido del órgano y las voces se interrumpen con la música de la dulzaina, y el tamboril, los danzantes, vestidos de media gala, esperan arrodillados al Santísimo y comienzan a bailar tocando las castañuelas sin dar nunca la espalda al Santísimo. Cuando llegan al presbiterio, se van dividiendo de dos en dos, y se colocan a ambos lados del ábside, rodeando el altar. Cuando el cura deja al Santísimo en el altar la música para y se vuelve a cantar el "Tantum Ergo". Las "Vísperas" termina con la Bendición a los fieles, los danzantes comienzan otra vez a bailar al ritmo de la dulzaina y el tamboril, arrodillándose cuando el sacerdote les muestra al Santísimo.
La noche entre víspera y día es el momento en el que los jóvenes danzantes erigen los arcos vegetales con enramadas de hojas verdes de chopo que adornarán el Ayuntamiento, la casa del cura y la portada principal de la iglesia de Sta. María.